Estamos acostumbrados a pedir en los bares, cafeterías y restaurantes el café que nos gusta. Que nuestros gustos o costumbres sean parte de una cultura arraigada sobre cómo tomar el café en nuestro país.
El café en España en sus dos variedades de tostado, natural y torrefacto, conforman todos los tipos de café en España que se consumen a diario. Dentro de los cafés españoles podemos encontrar una amplia variedad e incluso especialidades regionales capaces de darle un toque único a la preparación del café.
Y es que, aunque los cafés más clásicos en España sean el café solo, con leche y el cortado, existen aún muchos más tipos de café que mantienen no solo todo su sabor, sino también la capacidad de adaptarse a todo tipo de gustos. En Incapto te descubrimos los tipos de café en España y cómo realizarlos correctamente.
Cuáles son los tipos de café en España
La mejor forma de conseguir reconocer todos los cafés españoles es agruparlos por su tipo de preparación. De esta manera, podemos dividirlos en tres grandes grupos: solo café, café con leche y café con otros ingredientes.
Solo café
Dentro de esta categoría existen cuatro tipos de café, todos ellos elaborados únicamente con café. Sin embargo, también puede añadirse agua para variar su sabor.
- Café solo: este tipo de café es el equivalente al espresso italiano. Este se prepara realizando una infusión con agua a presión para conseguir el máximo sabor.
- Café corto: A veces se confunde con el espresso al ser un café mucho más concentrado. Sin embargo, este se prepara utilizando la mitad del agua y, por lo tanto, su cantidad es prácticamente la mitad que en el caso del café solo.
- Café americano: Utilizando la misma cantidad utilizada para elaborar el café expreso, se le debe añadir agua caliente para así doblar la cantidad y suavizando el sabor al diluirlo en agua.
- Café solo doble: Elaborado con la misma cantidad, o muy parecida, a la que se utiliza para el café americano, el solo doble no se reduce, al contrario, la cantidad de café es proporcional a la de agua. Por lo tanto, el resultado es un café con más cuerpo y con un sabor más intenso.
- Café con hielo: Tan sencillo de preparar como elaborar un café solo al que se le acompaña con un vaso con hielo para así enfriarlo.
Cafés con leche
Para elaborar este tipo de cafés necesitamos de, además de un buen café, una cantidad de leche precisa para moldear su textura, cuerpo e intensidad. Además, la leche se puede preparar como espuma o como crema para mejorar no solo la presentación, sino también el sabor y la textura. Aunque en este caso suele ser habitual solo en cafeterías especializadas.
- Café cortado: Si lo que se busca es disfrutar del sabor del café sin perder demasiado la intensidad, se utiliza generalmente una cantidad equivalente a un 75% de café y un 25% de leche. Además, se sirve generalmente en un recipiente, ya sea vaso o taza, de un volumen parecido al del café solo.
- Café con leche: Servidor generalmente en taza grande, se deben igualar las proporciones entre el café y la leche. Es decir, 50% de leche y 50% de café. Normalmente, se sirve con leche ya calentada, pero es posible utilizar la leche para enfriar el café al gusto.
- Café manchado: Con el mismo volumen del café con leche, el manchado se elabora con una proporción del 75% de leche y 25% de café. Ideal para los que no están acostumbrados a tomar café de manera regular, pero que sí quieren disfrutar de su sabor.
Cafés con otros ingredientes
Terminamos con dos de los cafés más populares para tomar en la sobremesa.
- Café carajillo: La base del carajillo es un café espresso al que se le agrega licor, generalmente brandi. Sin embargo, el carajillo puede estar elaborado con otros licores como whisky o anís.
- Café bombón: Ideal para amantes del dulce, se prepara utilizando una base de café solo al que se le agrega una generosa directamente leche condensada. La mezcla forma una textura y sabor que recuerdan al de un caramelo.
Cafés regionales de España
- Blanco y negro: café frío que se prepara con un café solo o solo doble al que se le agrega una bola de helado. Aunque el sabor por excelencia para su preparación es la nata, es posible encontrarlo con otros sabores como la vainilla o la leche merengada. Este café es propio de la Comunidad Valenciana.
- Barraquito: Utilizando lo que se considera un verdadero carajillo, es decir, un café espresso al que se le añade corteza de limón y canela, además de licor, el barraquito se culmina con el toque dulce de la leche condensada y espuma de leche.
- Leche y leche: También propio de las islas canarias, este café con leche se prepara utilizando la mitad de leche que se utiliza de manera habitual para completar el resto del 50% añadido con leche condensada.
- Café con gotas: Este es uno de los cafés típicos de la sobremesa gallega. Se prepara con unas gotas de orujo caliente que se sirven al gusto sobre un café solo.
Con las cafeteras de Incapto podrás realizar el café solo, solo largo, americano (haciendo la extracción de café y poniéndole agua caliente también a la cafetera), con leche/cortado (usando nuestro espumador de leche eléctrico o cappucinador o calentándola con la cafetera con vaporizador), entre otros…
