En la actualidad, podemos encontrar máquinas de café de todos los modelos, tamaños y colores. Pero existe una, que sigue conservando ese rinconcito especial en casi todas las cocinas del mundo (por no decir todas). Pues sí, hablamos de la cafetera moka de toda la vida, también conocida como cafetera italiana. Uno de los accesorios que no puede faltar, en los hogares de aquellos amantes de una taza bien cargada por las mañanas.
Además de preparar un delicioso café, esta cafetera también es todo un icono del estilo vintage y al mismo tiempo, es un emblema de la cultura italiana. A pesar de ser conocida por ambos aspectos, son muy pocas las personas que saben sobre su influencia dentro del mundo cafetalero.
Es por ello que, Incapto Coffee, te invita a seguir leyendo para descubrir sus orígenes, y de cómo esta sencilla cafetera logró revolucionar el espresso, desplazando la preparación casera.
Aparición del café en Italia
Como bien se sabe, la cafetera moka tiene nacionalidad europea, específicamente italiana. Pero antes de enfocarnos directamente en sus orígenes, quisiéramos detallar cómo fue la llegada del café a Italia, donde realmente comenzó todo.
Resulta que, el café sorprendió a los italianos por allá en el siglo XVI, siendo presentado como un producto exquisito, exótico y lujoso. Esto último se debía a su alto costo. Así que, solo las personas adineradas tenían acceso a la bebida, en las denominadas casas de café comerciales. En estos lugares solían prepararlo y servirlo, en sus respectivos recipientes. En cuanto a la elaboración, utilizaban el método de infusión caliente. La cual consiste en verter agua caliente para hacer bebidas, en este caso el café o el té.
La aparición de este producto, causó tal revuelo, que motivó a muchos, buscar distintas maneras de preparar café, sin complicación alguna. El experimentar con varios métodos, los llevó a la extracción por medio del vapor. Dando así la bienvenida a las primeras máquinas de espresso, que conquistaron al mercado en 1884. Gracias a esta forma de preparación, el tiempo de la extracción de la bebida mejoró significativamente. Ya que, podían servir varias tazas de café recién hecho en tiempo récord.
Las primeras cafeteras espressos
Seguro que te preguntas, ¿Cómo funcionaban las primeras máquinas de espresso? La respuesta es que, para ello se utilizaba agua hirviendo bajo presión. Con el propósito de forzar al vapor y este pasará por medio de una molienda fina de café. Esto daba como resultado una bebida concentrada, con sabor fuerte y disponible para llegar a la taza de forma exprés.
Estas cafeteras eran demasiado grandes, por lo tanto solo se usaban de forma comercial. Es decir, en bares de estilo norteamericano, donde los clientes pedían y recibían su café en la barra. Para ese entonces aún no se había implementado, servir la bebida directo a la mesa. Por ello este servicio veloz, caía como anillo al dedo para aquellos trabajadores que contaban con poco tiempo en sus horas de descanso. Que por extraño que parezca, esta tradición continúa más vigente que nunca.
¿Cómo nace la cafetera moka?
Durante los años cincuenta, las casas italianas tenían como producto principal al café. Este increíble producto se hizo muy popular, ya que fue capaz de acelerar el consumismo, y el aumento de la comodidad. Frente a esta novedad, se empezó a reproducir la tan anhelada máquina de espresso para casa.
La cafetera moka, que jamás será opacada por las máquinas de monodosis de café. Fue creada por el italiano Alfonso Bialetti en 1933 y, posteriormente, fue patentada por Luigi de Ponti en su nombre. Pero es Bialetti, quien pudo beneficiarse del crecimiento económico de su país años después.
Con respecto a su diseño, al principio estuvo inspirado en una lavadora primitiva llamada “lisciveuse”, que era una olla gigante, donde se calentaba el agua junto a la ropa y el jabón. Pero luego esto cambió, pasó de ser una máquina gigante a la que conocemos hoy en día. Es decir, de modelo octogonal hecha de aluminio, que encaja perfectamente en el fuego de nuestras cocinas. En relación al precio, siempre ha resultado ser una de las más económicas desde su creación.
Su modelo de uso doméstico, se divide en tres partes principales. Tal como ocurre con la máquina de espresso, el agua hirviendo que se presuriza a causa del vapor, que pasa por medio de la molienda. El vapor se crea dentro de la caldera. Posteriormente, la presión incrementa hasta que finalmente el agua pasa por el embudo y la molida, para que así, entre a la cámara superior. Sobre su sonido, este resulta bastante familiar, porque se escucha ese borboteo tan característico cuando la caldera está prácticamente vacía, y avisa que nuestro café está listo.
A pesar de que, la cafetera moka no produce crema, sí es capaz de regalarnos un shot de café muy parecido al espresso, llegando a ser un aporte importante al crecimiento de la cultura cafecera.
¿De dónde proviene su nombre?
A pesar que muchos la llamen cafetera italiana, su verdadero nombre es moka, y es en honor a una ciudad llamada igual, la cual era hasta el siglo XVIII uno de los puertos más importantes, ya que era donde se exportaba café de Yemen a Europa.
En pocas palabras, la moka logró romper todos los esquemas y se convirtió en todo un éxito comercial. De hecho en el libro de Tristan Stephenson, titulado ‘The curious barista’s guide to coffee’, detalla que en menos de diez años, el espress superó las metas, tras vender 20 millones de unidades, un dato que coincide con el incremento del consumo del café en casa durante los años 1955 y 1970. Actualmente, Bialetti asegura que su cafetera moka está entre nueve de cada diez hogares en Italia.
La cafetera italiana conquista al mundo
Como era de esperarse, el italiano Alfonso Bialetti, ya se había consagrado como el mayor fabricante de dispositivos para preparar café, en los años cincuenta. Esto le abrió las puertas dentro del mercado internacional. Para sorpresa de muchos, a finales del siglo XX, las ventas alcanzaron cerca de los 220 millones.
Su fama y fortuna se debía en gran parte a su influencia en la introducción de la cultura cafetalera, en el mundo, incluso, también contribuyeron las cafeteras de espresso de la competencia. Que estuvieron influenciadas por las innovaciones del gremio manufacturero del siglo XX, donde surgían materiales como el aluminio, uno de los más accesible a escala industrial. Por otra parte, la comunidad italiana también jugó un papel importante en la popularización de la bebida.
Cabe destacar que, hoy en día las importaciones y exportaciones, tienen una demanda en la variedad de granos robusta. Debido a que cumplen con todos los requisitos del gremio espresso, y que la cafetera moka aportó grano de arena para su consolidación.
De acuerdo a un reporte emitido por Centro para la Promoción de las Importaciones de los Países Bajos, detallan que Italia es el segundo importador de café verde Europa. Y el segundo exportador de café tostado en todo el continente. Derivando un crecimiento para aquellos caficultores en el mundo. Especialmente, para quienes que pueden cumplir con los exigentes requisitos de la industria.
En los últimos años, el café seleccionado es de calidad superior, el mismo que se usa para hacer cappuccino, espresso o filtrado, y que ha tenido un importante crecimiento. Sin embargo, las cifras no fueron las mismas para el café instantáneo, que registró una baja en el 2015.
¡Apuesta por los granos naturales!
No hay dudas que la cafetera moka, ha influido positivamente en las ventas. Al mismo tiempo, se ha encargado de expandir la cultura del café en todos los rincones del mundo. Es por ello que, cada vez son más las personas que compran granos naturales para preparar un buen espresso desde casa. Si entras en este grupo, te invitamos visitar el catálogo de productos de Incapto Coffee y seleccionar el de tu preferencia.
Para disfrutar de una buena taza, lo ideal es moler tus propios granos. Es por eso que, nuestro equipo de expertos te recomienda utilizar un molinillo manual. Porque resultan ser bastantes económicos y son capaces de controlar el tipo de molienda que queremos. Por si fuera poco, además de aportar la dosis necesaria de café, también podemos llevarlos a todas partes y disfrutar de nuestra bebida favorita donde sea.
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